Introducción
La terapia antiplaquetaria doble se recomienda tras la implantación de un stent coronario para prevenir las complicaciones trombóticas; sin embargo los riesgos y beneficios de dicho tratamiento después de 1 año son inciertos.
Material y métodos
Los pacientes se incluyeron tras la implantación de un stent coronario liberador de fármaco. Tras 12 meses de tratamiento con una tienopiridina (clopidogrel o prasugrel) y aspirina, los pacientes se asignaron aleatoriamente a recibir tratamiento tienopiridínico o placebo durante 18 meses adicionales; todos los pacientes siguieron con aspirina. El objetivo co-primario del estudio fue trombosis del stent y eventos cardiovasculares y cerebrovasculares adversos mayores (combinación de muerte, infarto de miocardio, o ictus) durante el período comprendido entre los 12 y 30 meses. El objetivo de seguridad primario fue sangrado moderado o importante.
Resultados
Un total de 9961 pacientes fueros aleatoriamente asignados a continuar con tratamiento tienopiridínico o placebo. El tratamiento continuado con tienopiridinas, comparado con placebo, redujo la incidencia de trombosis del stent (0.4% vs. 1.4%; riesgo relativo, 0.29 [95% intervalo de confianza {IC}, 0.17 to 0.48]; P<0.001) y eventos cardiovasculares y cerebrovasculares adversos mayores (4.3% vs. 5.9%; riesgo relativo, 0.71 [95% IC, 0.59 to 0.85]; P<0.001). La incidencia de infarto de miocardio fue inferior con tratamiento tienopiridínico que con placebo (2.1% vs. 4.1%; riesgo relativo, 0.47; P<0.001). La incidencia de muerte por cualquier causa fue del 2,0% en el grupo que siguió tratamiento tienopiridínico y del 1,5% en el grupo placebo (riesgo relativo, 1.36 [95% IC, 1.00 to 1.85]; P=0.05). La incidencia de sangrado moderado o importante se vió incrementada con el tratamiento tienopiridínico (2.5% vs. 1.6%, P=0.001). Se observó un riesgo elevado de trombosis del stent y de infarto de miocardio en ambos grupos durante los 3 meses posteriores a la discontinuación del tratamiento tienopiridínico.
Conclusiones
El tratamiento antiplaquetario doble posterior a 1 año tras la implantación de un stent liberador de fármaco, en comparación con el tratamiento únicamente con aspirina, reduce de forma significativa el riesgo de trombosis del stent y los eventos cardiovasculares y cerebrovasculares adversos mayores pero se asocia a un aumento del riesgo de sangrado.