Es producido por una enzima que al bloquearla experimentalmente provocó hipertensión y la reacción anómala de los vasos sanguíneos.
El sulfuro de hidrógeno regula la presión sanguínea y el funcionamiento de los vasos sanguíneos en modelos experimentales utilizados en laboratorio, según un estudio de la Universidad de Saskatchewan en Saskatoon (Canadá) que se publica en la revista Science.
Según los investigadores, el descubrimiento aumenta la posibilidad de que la mejora farmacológica del sulfuro de hidrógeno pueda dar lugar a un tratamiento alternativo de la hipertensión en humanos.
Los científicos, dirigidos por Guangdon Yan, muestran que el sulfuro de hidrógeno es producido por una enzima particular, la CSE, y que el bloqueo de esta enzima provocó hipertensión y la respuesta defectuosa de los vasos sanguíneos.
Los investigadores crearon un modelo con eliminaciones específicas del gen que codifica CSE y observaron reducciones importantes en los niveles de sulfuro de hidrógeno en el suero, corazón, aorta y otros tejidos.
Este modelo experimental que carecía de CSE mostraba una hipertensión pronunciada que comenzaba hacia las siete semanas de edad y también respuestas defectuosas a los tratamientos que promueven la dilatación de los vasos sanguíneos.
Los resultados indican que el sulfuro de hidrógeno se une al óxido nítrico como un gas que regula la presión sanguínea y podría allanar el camino hacia nuevos tratamiento para los trastornos vasculares.